El uso de vehículos particulares y de movilidad personal se dispara durante la pandemia
El uso de vehículos particulares y de movilidad personal, como patinetes eléctricos, se ha disparado un 18% y un 33%, respectivamente tras la pandemia provocada por la Covid-19. Todo ello en detrimento del transporte público, y de los taxis y VTC, que han caído un 46% y un 29% respectivamente.
Todo ello se desprende del último ‘Estudio de Movilidad Segura y Sostenible del Centro de Estudios Ponle Freno-AXA’, presentado el pasado 22 de febrero en una rueda de prensa online. Dicho informe recoge la percepción de más de 4.000 conductores sobre hábitos en los desplazamientos y otros aspectos relacionados con la movilidad segura, sostenible, accesible y conectada.
Hay concienciación, aunque falta formación
El informe muestra cómo la mayoría de los consultados considera que la formación es una asignatura pendiente, especialmente entre los hombres (45%) y el tramo de edad comprendido entre los 35 a 44 años (48%). En este sentido, destaca la opinión de que hay que usar más recursos audiovisuales (73%), la formación de los sistemas tecnológicos y de seguridad que incorporan los vehículos (73%), la posibilidad de obtener puntos extras tras recibir cursos sobre conducción segura (70%) o establecer un mínimo de clases prácticas (68%). Además, el 64% está a favor de aumentar las restricciones del permiso de conducir en función de la edad y el 61% pide que haya que obtener un permiso para circular por las ciudades con bicicleta o patín.
Movilidad sostenible, accesible y conectada
Con relación a la movilidad sostenible, 9 de cada 10 opinan que la contaminación de vehículos es un problema importante o muy importante, aunque la mayoría (64%) considera que es la industria el principal “culpable”.
En el apartado de movilidad accesible, el Metro es el transporte público más valorado (con 6,21 puntos sobre 10) aunque, en general, todo el transporte público aprueba, incluido el alquiler de bicicletas. En este punto, los consultados consideran que hay un amplio margen de mejora en cuanto a la accesibilidad de personas con movilidad reducida (40%) y a la seguridad en los desplazamientos a pie con menores (32%).
Respecto a la movilidad conectada, 1 de cada 2 cree que no hay suficiente información sobre el tráfico en tiempo real, lo que podría solucionarse con aplicaciones que ayuden a mejorar la movilidad y a planificar mejores rutas y más rápidas, ante lo que los conductores estarían dispuestos a ceder sus datos personales. En este sentido, de las apps disponibles, los sistemas de navegación son los más utilizados (76%), seguidos del pago en aparcamientos regulados y del uso del transporte público (44%), frente al uso minoritario tanto del alquiler de vehículos como de los agregadores de movilidad, en torno a un 15%.
Finalmente, preguntados por la confianza que, de cara al futuro, les ofrecen los vehículos particulares sin conductor, un 48% dice que no lo usaría, frente al 28% que asegura que sí subiría a este tipo de vehículos, subiendo el porcentaje al 35% entre los jóvenes (18-34 años).