El sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (GESTHA) ha denunciado que la Agencia Tributaria podría estar vulnerando la intimidad y protección de datos de 16 millones de contribuyentes dada la imposibilidad de poder garantizar la confidencialidad, así como la dificultad de preservar el sigilo y la discreción de las actuaciones tributarias, aduaneras y de la contabilidad y auditoría pública.
Esto se debe a que, a raíz de una orden ministerial fechada en 2013, los despachos individuales fueron sustituidos por espacios diáfanos y compartidos, lo que ha desatado las quejas de los técnicos de Hacienda, que señalan la falta de intimidad de contribuyentes y asesores fiscales que se sienten «observados» y «escuchados» por personas ajenas. Por este motivo, el sindicato animará a los colegios profesionales de la asesoría tributaria a que formalicen las quejas de sus asociados.
Asimismo, según Gestha, estas nuevas estructuras físicas -también conocidas como ‘praderas’- podrían tener un impacto negativo en la lucha contra el fraude fiscal, que cifran en pérdidas de hasta 595 millones de euros, a lo que habría que añadir el impacto económico de la ralentización en el control del gasto en el sector público estatal.
Y es que, apunta el sindicato, esta situación es más crítica para los funcionarios de la Unidad de apoyo a la Fiscalía Anticorrupción o para los técnicos de Hacienda en peritajes y auxilio judicial en procesos penales, como ha sucedido con los técnicos de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) en peritajes de control del gasto público de impacto mediático.
Por este motivo, Gestha solicitará al Ministerio de Hacienda una revisión de la Orden Ministerial por la que se organizan los espacios de trabajo, y que se recupere el uso de los despachos individuales.